Nuestra historia comienza 4 años atrás, un día de las madres, ese día los hombres de mi familia queríamos cocinar algo diferente para celebrar su día. Luego de dar ideas decidimos hacer pasteles andinos. Mi madre me preguntó si sabía hacer la masa, le dije que no y ella me enseñó en el momento y así comenzamos a realizar nuestros primeros pasteles los cuales quedaron muy sabrosos. De ahí en adelante seguimos mi esposa y yo realizando pasteles los fines de semana hasta convertirse en un pequeño negocio desde nuestra casa para satisfacer a clientes que nos pedían para desayunos familiares. Fuimos perfeccionando nuestros pasteles gracias a mi suegra que nos dió varios tips para mejorar el sabor. Luego decidimos emigrar a los Estados Unidos y comenzamos nuestro emprendimiento con el nombre » los pasteles de María» en honor a nuestra hija María Fernanda, comenzamos a trabajar justo en el momento en el que inicia la pandemia del COVID ya que mi esposa queda sin trabajo. Vimos que nuestro producto comenzaba a tener buena aceptación y seguido a ello excelentes comentarios y eso nos impulso más a seguir adelante con nuestro emprendimiento. Hoy luego de 4 años estamos muy agradecidos con todos aquellos que nos han dado y continúan apoyándonos día a día. Aquí estamos y aquí estaremos para seguir complaciendolos con lo mejor de nosotros. Gracias infinitas.